He dejado atrás
mis ángeles y demonios.
De alguna manera
ya estoy muerto
con todos los que se fueron.
Pero sobre todo lo estoy
desde que me dijiste adiós
en medio de aquella tormenta.
En la llanura
habito mi propio laberinto
sin muros y sin sombras.
En la llanura
habito mi propio laberinto
sin muros y sin sombras.
© 2019 Video y Texto de Arturo García Fernández
Sorpresas te da la vida, sí señor.
ResponderEliminarDesconocía tu talento con las letras. Pas mal! ;·)
(Como operador de cámara, quizás necesites mejorar...)
Sigue así. Recuerdos a la familia y un fuerte abrazo!
Todo es muy sugerente, yo sigo arrastrándolos... y también muero con cada amigo que se va... Que difícil encontrar salida al propio laberinto..., aunque hay una temible dama que resuelve todos los enigmas...
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